Tommy Brooks, el legendario entrenador de boxeo, ha muerto a los 71 años. El promotor Lou DiBella compartió la noticia, diciendo que Brooks perdió su lucha contra un cáncer agresivo.
El viaje de Brooks en el boxeo comenzó temprano. Ganó el título de Medio Pesado Nacional AAU de 1975 como amateur, venciendo a Tom Sullivan y Michael Spinks. También sirvió en la Fuerza Aérea de EE. UU., donde se convirtió en campeón militar de boxeo. Brooks se convirtió en profesional y peleó hasta 1979, terminando con un récord de 7-3.
Pero el verdadero impacto de Brooks llegó como entrenador. A mediados de los años 90, guió a Evander Holyfield a dos grandes victorias sobre Mike Tyson. Esto colocó a Brooks en el mapa como un entrenador de primer nivel.
Brooks trabajó con muchos grandes boxeadores. Ayudó a Mike Tyson durante su regreso a principios de los 2000, lo que llevó a una racha de seis peleas sin perder. El entrenador también agudizó las habilidades de Vitali y Wladimir Klitschko. Otros boxeadores que entrenó incluyen a Meldrick Taylor, Mike McCallum, Vinny Pazienza y Charles Murray.
"Demasiado joven. Gran hombre del boxeo y aún mejor persona."
Las palabras de DiBella resumen cómo muchos en el boxeo veían a Brooks. No era ruidoso ni ostentoso, pero su nombre tenía peso en los gimnasios de boxeo durante décadas.
Brooks tenía un talento especial para reconstruir boxeadores. Como dijo un observador: "Su verdadero don, resultó que, no estaba en lanzar golpes. Estaba en enseñar a otros a lanzarlos mejor."
En sus últimos años, Brooks se centró en mentorear a jóvenes boxeadores y en la capacitación. Se inspiró en leyendas del boxeo como Eddie Futch y Archie Moore.
Brooks jugó un papel clave en algunos de los momentos más grandes del boxeo. Estuvo presente en las guerras de Holyfield con Tyson y ayudó a dar forma al ascenso de los hermanos Klitschko.
El deporte del boxeo le debe mucho a Tommy Brooks. Su impacto vivirá a través de los campeones que entrenó, los boxeadores que inspiró y los rincones en los que estuvo. Brooks puede haber partido, pero su legado en el boxeo durará muchos años más.