La situación se volvió más compleja cuando 3 Wire Sports publicó resultados de pruebas genéticas filtrados de un laboratorio en Nueva Delhi. Estos resultados sugieren que Khelif tiene cromosomas XY, que se encuentran típicamente en los hombres, y niveles elevados de testosterona. Las pruebas también indicaron una condición llamada deficiencia de 5-alfa reductasa.
Khelif no estaba contenta con que esta información saliera a la luz. Se sintió acosada y pensó que su privacidad había sido violada, según el medio francés Le Correspondant.
El Comité Olímpico Internacional (COI) también se involucró. El presidente del COI, Thomas Bach, intervino y descartó dos pruebas de 2023, añadiendo otra capa a la ya complicada situación.
El World Boxing, la organización encargada del deporte, ha realizado algunos cambios importantes debido a todo esto. Han dicho que comenzarán las pruebas de sexo obligatorias el próximo mes. También se han disculpado con la Federación de Boxeo Argelina por cómo se manejaron las cosas.
"Estoy escribiendo personalmente para ofrecer una disculpa formal y sincera por esto y para reconocer que su privacidad debería haber sido protegida," dijo el presidente de World Boxing, Boris van der Vorst, a la federación argelina.
Todo este asunto podría cambiar las cosas para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. World Boxing estará a cargo del boxeo allí, y están sintiendo presión por parte de boxeadores y federaciones sobre las reglas de quién puede competir como mujer.
World Boxing dice que quieren "garantizar la seguridad de todos los participantes y proporcionar un campo de juego equitativo para hombres y mujeres."
Khelif planea defender su medalla en 2028, pero algunos boxeadores y organizaciones no quieren que compita. Este debate sobre quién debería poder boxear en eventos femeninos no se irá pronto.