Mikaela Mayer y Sandy Ryan volverán a subirse al ring el sábado 29 de marzo. La revancha boxística tendrá lugar en el Casino Fontainebleau de Las Vegas, Nevada, con el título welter de la OMB en juego.
El combate está programado para las 22:00 ET / 19:00 PT. Mayer defenderá su título ante la retadora Ryan en un combate que ha dado mucho que hablar entre los aficionados.
Top Rank y Matchroom Boxing han puesto mucho empeño en promocionar esta revancha. Han subido las apuestas con el aumento de las bolsas y los bonos PPV.
El ganador se llevará 425.000 dólares garantizados, mientras que el perdedor se llevará 250.000 dólares. Pero hay más dinero sobre la mesa. Si las suscripciones al PPV aumentan un 65%, el vencedor podría embolsarse la friolera de 2,5 millones de dólares. Incluso con un aumento del 60% en las suscripciones PPV, el ganador podría ganar 1,5 millones de dólares además de su salario base.
Estas cifras suponen un paso adelante respecto a las anteriores remuneraciones de Mayer. Ganó 300.000 dólares en sus combates contra Natasha Jonas y en su primer combate contra Ryan.
El trasfondo de la pelea añade más sabor a la mezcla. Mayer acusó a Ryan de llevarse a su entrenador cuando la boxeadora británica vino a entrenar a Estados Unidos. Las cosas se calentaron cuando Ryan esperó a Mayer fuera de su gimnasio de Nueva York, preparada con una lata de pintura roja.
"Voy a enseñarle a Sandy quién manda en el cuadrilátero", declaró Mayer en una entrevista previa al combate. "Si cree que puede entrar y llevarse lo que es mío, se las va a pagar".
Ryan respondió:
"Mikaela puede hablar todo lo que quiera. Estoy aquí para luchar, no para charlar. El sábado por la noche veremos quién tiene realmente lo que hay que tener".
Con el título del peso welter de la OMB en juego y cuentas personales que saldar, ambos púgiles traerán sin duda su mejor juego. La revancha promete ser una batalla por el honor, la dignidad y la supremacía del boxeo.
A medida que el reloj avanza hacia la noche del combate, la tensión entre estos dos guerreros sigue creciendo. Los aficionados a la lucha pueden esperar fuegos artificiales cuando suene la campana en Las Vegas.
