Livingstone Bramble, antiguo campeón de peso ligero de la AMB, ha fallecido a los 64 años. No se ha revelado la causa del fallecimiento. El fallecimiento de Bramble se suma al reciente luto en el boxeo, tras la muerte de George Foreman.
Nacido en San Cristóbal y Nieves, Bramble dejó su impronta como gran contragolpeador en la división de peso ligero. Comenzó su carrera profesional en 1980 y combatió hasta 2003, acumulando un récord de 40 victorias (25 por KO), 26 derrotas y 3 empates.
Bramble se hizo con el título de peso ligero de la AMB en junio de 1984 con una victoria por nocaut técnico sobre Ray "Boom Boom" Mancini en el Memorial Auditorium de Buffalo. Defendió con éxito su título en dos ocasiones: en una revancha por decisión unánime contra Mancini un año después y contra Tyrone Crawley. El reinado de Bramble llegó a su fin en 1986, cuando Edwin Rosario lo noqueó en una sorprendente derrota.
El excéntrico luchador rastafari era conocido por sus inusuales tácticas promocionales. Antes de su segundo combate con Mancini, Bramble sacó un muñeco de vudú en una rueda de prensa. Le pinchó los ojos con una aguja y le dijo: "Ray, dime cómo sientes tus ojos. Mira cómo se te salen los ojos ahora". En otro acto con los medios, llevó una calavera de cerámica, lo que llevó a muchos a pensar que estaba "loco".
El mánager de Bramble, Lou Duva, tenía cosas interesantes que decir sobre su púgil:
"Les digo a mis jóvenes boxeadores que si quieren hacerlo todo bien, no miren a Bramble. Lo hace todo mal, pero resulta que tiene razón. Sus oponentes no saben lo que viene a continuación, y esa pausa para intentar averiguarlo se convierte en su perdición".
Duva también admitió:
"La verdad es que está como una cabra. Después de cada una de sus peleas, estoy diez días en un hospital psiquiátrico para recuperarme. No puedo controlarle, no se le puede educar, no me hace caso".
La carrera de Bramble tomó un rumbo descendente al principio y duró más de lo que debería. Su palmarés acabó con muchas derrotas. A pesar de ello, los aficionados le recordarán como un tipo peculiar que sabía vender peleas y buscaba divertirse.
El campeón era famoso por sus inusuales mascotas. A menudo subía al ring con una boa constrictor llamada Perro. También tenía un pit bull terrier llamado Snake y un hurón llamado Spider.
Este deporte echará de menos el enfoque único que Bramble tenía del boxeo y de la vida.