Earnie Shavers, el duro peso pesado conocido como "El Destructor Negro", luchó contra Muhammad Ali y Larry Holmes durante su carrera. Eligió a Holmes como el mejor luchador de los dos.
Shavers boxeó durante 26 años y luchó dos veces por el título mundial de los pesos pesados. Se retiró en 1995 debido a las lesiones oculares que sufrió en sus combates de regreso. Lamentablemente, falleció en septiembre de 2022 tras una corta enfermedad.
En 1977, Shavers perdió ante Muhammad Ali por decisión unánime. La pelea lo puso en el mapa. Dijo:
"Sí, esa pelea me dio reconocimiento mundial. Fue un gran combate y herí a Muhammad Ali en un par de ocasiones, pero él ganó la pelea; anotó más puntos que yo a lo largo de los 15 asaltos".
Al año siguiente, Shavers perdió otro combate por decisión unánime, esta vez contra Larry Holmes. A pesar de perder ambos combates, Shavers pensaba que Holmes era mejor boxeador. Explicó por qué en una entrevista con Boxing News:
"Creo que Larry Holmes fue el mejor boxeador con el que he peleado. Era mejor que Ali. Verás, ambos tenían grandes jabs, pero el de Ali era un jab que se deslizaba; ¡el de Holmes era un jab de pegador! Ambos eran realmente grandes, por supuesto, pero le doy a Larry la ventaja".
Más tarde, Holmes se convirtió en el único hombre que detuvo a Ali, aunque éste ya había pasado su mejor momento y no debería haber peleado por entonces.
Shavers también luchó contra otros pesos pesados estadounidenses como Ron Lyle. Ali había derrotado a Lyle en un combate por el título mundial en 1975.
Aunque Shavers nunca ganó un título mundial, dejó una gran huella en el boxeo. Su potencia y dureza pusieron a prueba a los mejores pesos pesados de su época. Su fallecimiento en 2022 fue llorado por el mundo del boxeo, que lo recuerda como uno de los pegadores más duros de la historia de los pesos pesados.
