La defensa del título de peso ligero del CMB de Shakur Stevenson dio un giro inesperado este fin de semana en Riad (Arabia Saudí). El oponente original del campeón, Floyd Schofield, se retiró de la pelea por enfermedad, dejando el evento en peligro.
El martes, la Junta de Control del Boxeo Británico tomó la decisión de retirar a Schofield del combate tras caer enfermo. Este cambio repentino obligó a los organizadores a buscar un sustituto con poca antelación.
El invicto púgil británico Josh Padley aceptó el reto. Padley, que recientemente impresionó con su victoria sobre Mark Chamberlain en septiembre, se enfrentará ahora a Stevenson por el título de peso ligero del CMB.
Stevenson compartió sus pensamientos sobre la situación en una entrevista con The Ring. El campeón no se guardó sus opiniones sobre la retirada de Schofield.
"Ya predije que no iba a pelear conmigo. Cuando vi a ese chico en la semana de la pelea parecía un niño perdido. No conoce nada mejor".
Stevenson criticó la preparación y la gestión de Schofield:
"No tiene ninguna guía real. Su padre intenta guiarle, pero no lo hace de verdad. Honestamente, pensé que no había forma de que alguien pusiera a ese niño con guantes de ocho onzas en el ring conmigo. No me lo esperaba".
A pesar de sus duras palabras para Schofield, Stevenson mostró respeto por la voluntad de Padley de aceptar el combate con tan poco tiempo de preaviso:
"Josh Padley ha intervenido, así que hay que respetar al tipo que ha intervenido con tan poco tiempo. Espero que venga y lo haga lo mejor posible, pero yo estoy en la zona, así que no hay forma de sacarme de ella".
Stevenson entra en la pelea como gran favorito contra Padley. Si gana, podría enfrentarse a Gervonta Davis en un combate de unificación a finales de año.
La confianza del campeón sigue siendo alta a pesar del cambio de oponente de última hora. Stevenson parece listo para defender su título y seguir adelante con sus planes profesionales.