Mike Tyson ha explicado recientemente por qué nunca se enfrentó a Riddick Bowe. El ex campeón de los pesos pesados dice que no fue el miedo lo que le impidió enfrentarse a su antiguo compañero de escuela, sino el amor y el respeto.
Tyson, conocido como "Iron Mike", hizo historia en 1986 al noquear a Trevor Berbick y convertirse en el campeón de los pesos pesados más joven de la historia, con sólo 20 años. A continuación dominó la división, enfrentándose a leyendas como Larry Holmes, Frank Bruno, Evander Holyfield y Lennox Lewis a lo largo de su carrera de 59 combates.
Pero faltaba un gran nombre en el currículum de Tyson: su compatriota de Brooklyn Riddick "Big Daddy" Bowe. Ambos crecieron en el mismo barrio e incluso fueron juntos al colegio. Bowe siempre afirmó que Tyson le esquivó porque tenía miedo.
En una reciente entrevista con la CNN, Tyson dejó las cosas claras:
"Quiero a Riddick Bowe. Fuimos juntos a la escuela. Eso es algo que cambiaría. En esta etapa de mi vida y siendo tan consciente como soy, no creo que peleara con él. Es demasiado irrespetuoso".
Tyson continuó explicando su filosofía de lucha:
"La única razón por la que le pones las manos encima a alguien, incluso en una pelea callejera, si eres consciente, es porque no le tienes respeto. Los niños pelean porque no conocen nada mejor. Pero como hombres adultos que pelean, si están conscientes, la única razón por la que te pondré las manos encima es porque no te tengo respeto si tenemos una pelea".
Bowe tuvo una carrera impresionante, llegó a ser campeón indiscutible y venció a Evander Holyfield dos veces en su serie de tres combates. Pero siempre se preguntará qué habría pasado si él y Tyson se hubieran encontrado en el ring.
Para Tyson, parece que el combate no tenía sentido a nivel personal. Su confesión arroja nueva luz sobre un enfrentamiento que los aficionados han debatido durante años. Resulta que a veces incluso el hombre más malo del planeta antepone la amistad a todo lo demás.