Tyson, conocido como "Iron Mike", luchó contra muchos de los mejores pesos pesados de su época. Noqueó a Trevor Berbick en sólo dos asaltos y se proclamó campeón del mundo a la tierna edad de 20 años, 4 meses y 22 días. Esta hazaña le convirtió en el campeón de los pesos pesados más joven de la historia del boxeo.
A lo largo de su carrera, Tyson se enfrentó a grandes del boxeo como Evander Holyfield, Lennox Lewis, Larry Holmes, Frank Bruno, Michael Spinks y Tony Tucker. Luchó contra prácticamente todos los boxeadores de su época. Sin embargo, hubo un nombre que brilló por su ausencia: Riddick "Big Daddy" Bowe.
Bowe tuvo una carrera impresionante. Fue campeón del mundo en dos ocasiones, la primera en 1992, al derrotar a Evander Holyfield. Bowe y Holyfield protagonizaron una trilogía memorable, peleando tres veces entre 1992 y 1995. Su segundo combate, en 1993, supuso para Bowe la única derrota de su carrera profesional, que vengó en 1995 con un nocaut en el octavo asalto. Bowe terminó su carrera con un impresionante récord de 43 victorias, 1 derrota y 1 no combate.
Entonces, ¿por qué estos dos titanes de los pesos pesados no se enfrentaron nunca en el ring? Tyson explicó su razonamiento en una entrevista reciente:
"Me encanta Riddick Bowe. Fuimos juntos a la escuela. Eso es algo que cambiaría. En esta etapa de mi vida y siendo tan consciente como soy, no creo que [peleara con él]. Es demasiado irrespetuoso".
Tyson continuó explicando su filosofía sobre la lucha:
"La única razón por la que le pones las manos encima a alguien, incluso en una pelea callejera, si eres consciente, es porque no le respetas. Los niños pelean porque no conocen nada mejor. Pero los hombres adultos que se pelean, si están conscientes, la única razón por la que te pongo las manos encima es porque no te tengo respeto si tenemos una pelea".
Esta revelación ofrece una visión única de la mentalidad de uno de los competidores más temibles del boxeo. A pesar de su fama de agresivo en el cuadrilátero, la negativa de Tyson a pelear con Bowe por respeto y amistad muestra una faceta diferente del ex campeón.
La carrera de Tyson ha experimentado un reciente resurgimiento. Tras casi 20 años alejado del boxeo profesional, regresó al cuadrilátero para enfrentarse a Jake Paul, demostrando que su atractivo en este deporte sigue siendo fuerte.
La historia de Tyson y Bowe sirve para recordar que, incluso en un deporte tan exigente físicamente como el boxeo, las relaciones personales y el respeto pueden desempeñar un papel crucial a la hora de forjar carreras y legados.