Oleksandr Usyk venció a Tyson Fury en mayo de 2023, ganando los cuatro títulos mundiales y convirtiéndose en el primer campeón indiscutible de los pesos pesados en más de dos décadas.
En el combate, Usyk se impuso por decisión dividida tras una reñida contienda. Los ocho primeros asaltos fueron reñidos, pero Usyk derribó a Fury en el noveno y estuvo a punto de noquearlo. Fury se salvó gracias a la campana. El fuerte final de Usyk en los asaltos finales resultó clave para asegurarse la victoria.
Andy Lee, uno de los entrenadores de Fury, dijo en un principio que no pasó nada en la esquina. Pero ahora ha cambiado de opinión. Lee declaró a Sky Sports:
"Si hubiéramos ganado el combate, nadie habría dicho nada, pero probablemente hubo demasiadas voces en la esquina. No es bueno para un boxeador. No necesitas que te bombardeen. Así que me callo".
La derrota supuso la primera derrota de Fury, poniendo fin a su racha de imbatibilidad. La pelea había estado reñida hasta el fuerte final de Usyk. La esquina de Fury incluía a SugarHill Steward y John Fury junto a Lee, lo que puede haber provocado el problema de demasiadas voces.
La victoria de Usyk le convierte en el primer campeón indiscutible de los pesos pesados desde Lennox Lewis hace más de 20 años. Es un gran logro en la historia del boxeo.
Los aficionados no tendrán que esperar mucho para la revancha. Fury y Usyk volverán a verse las caras el 21 de diciembre. El combate dará a Fury la oportunidad de recuperar sus títulos y su condición de invicto, mientras que Usyk tratará de consolidar su posición en lo más alto de la división de los pesos pesados.