Gervonta Davis y Shakur Stevenson podrían enfrentarse en uno de los combates más intrigantes del boxeo. Ambos boxeadores ostentan títulos mundiales en la división de peso ligero y cuentan con récords invictos, pero sus estilos contrastantes hacen que este combate potencial sea difícil de predecir.
Davis, conocido como "Tank", se ha forjado una reputación de artista del nocaut. Ha ganado 28 de sus 30 combates por KO, haciendo gala de su estilo agresivo y sus potentes golpes. Su impresionante palmarés incluye la conquista del título de peso ligero junior de la IBF en 2017.
En el otro lado del ring, Stevenson confía más en sus habilidades defensivas. Ha ganado menos de la mitad de sus peleas por nocaut, prefiriendo superar a sus oponentes y ganar por decisión. Este marcado contraste en los estilos de lucha aumenta el atractivo del combate.
Abel Sánchez, que solía entrenar a Gennady Golovkin, compartió su opinión sobre el posible enfrentamiento con Fight Hub TV. Está a favor de la victoria de Davis, citando su naturaleza agresiva:
"Davis tiene esa 'rabia de Duran'. Quiere hacer daño a sus rivales. Esa es una cualidad importante en un luchador".
Sánchez fue aún más lejos, prediciendo que Davis vencería a todos los mejores púgiles en las 135 y 140 libras, incluyendo a Stevenson, Haney, Matías, López y García.
Por ahora, los aficionados tendrán que esperar a este combate de ensueño. Stevenson tiene entre manos una pelea contra el ex campeón mundial del peso superpluma Joe Cordina el 12 de octubre. Su equipo quiere que se enfrente después a William Zepeda antes de enfrentarse potencialmente a Davis.
Mientras tanto, Davis planea volver al ring en noviembre, aunque aún no se ha anunciado su rival.
El mundo del boxeo seguirá de cerca a ambos púgiles en sus próximos desafíos. La pregunta sigue en el aire: Cuando estos dos púgiles se enfrenten por fin, ¿conseguirá Davis acortar distancias y asestar sus potentes golpes a Stevenson, muy hábil a la defensiva? Sólo el tiempo lo dirá, pero una cosa es segura: este combate mantendrá a los aficionados expectantes hasta la última campanada.