Oleksandr Usyk se convirtió en mayo de 2023 en el campeón mundial indiscutible de los pesos pesados. El boxeador ucraniano venció por puntos a Tyson Fury tras 12 asaltos en Arabia Saudí, engrosando su ya impresionante palmarés.
El camino de Usyk hacia la cima comenzó en 2012, cuando ganó una medalla de oro olímpica en los Juegos de Londres. Después se convirtió en el campeón indiscutible del peso crucero en 2018 antes de ascender al peso pesado. Sus habilidades en el juego de pies, IQ en el ring y atletismo lo han colocado en la cima de muchas listas libra por libra.
La pelea contra Fury no fue solo un golpe de suerte. Usyk pasó nueve meses trabajando una técnica específica: su poderosa mano izquierda.
"Fue una acción planificada en la que trabajé durante nueve meses. Era necesario demostrar inmediatamente quién es el jefe en el ring".
Esta preparación dio sus frutos en el noveno asalto, cuando Usyk conectó una fuerte izquierda que envió a Fury a la lona para una cuenta de 10.
Las rutinas de entrenamiento de Usyk son tan singulares como eficaces. Es conocido por hacer malabares en el ring, ejercicios de equilibrio, coger monedas e incluso jugar al ajedrez para mantener la mente despierta. Estos métodos poco convencionales parecen funcionar bien para el campeón ucraniano.
La victoria sobre Fury convirtió a Usyk en el primer campeón indiscutible de los pesos pesados con cuatro cinturones. Sin embargo, desde entonces ha tenido que dejar vacante el cinturón de la IBF.
Ahora, Usyk se prepara para la revancha con Fury en diciembre de 2023. En una entrevista concedida a Mail Sport Boxing, Usyk compartió sus impresiones sobre el próximo combate:
"Creo que será aún más difícil. Mira, yo siempre me preparo para una noche dura, nunca fácil. Espero que el cosmos me aplaste para que sólo mis ojos vean lo que ocurre. Me preparo para esas cosas. No creo que vaya a ser más fácil para mí, pero no necesito que lo sea".
La mentalidad de Usyk demuestra que no se duerme en los laureles. Se está preparando para una pelea aún más dura, lo que es un testimonio de su fuerte juego mental. Con tres de los cuatro cinturones principales en juego, la revancha promete ser otro emocionante capítulo de la historia del boxeo de los pesos pesados.