Ryan García (25-1, 20 KOs) se enfrenta a un año de prisión en un caso en el que está acusado de destrozar y causar daños por valor de 15.000 dólares en un hotel de Beverly Hills.
García fue detenido por este caso a principios de julio y puesto en libertad tras ser interrogado. Está previsto que la acusación formal se haga pública en agosto y que todo el caso se resuelva este año.
En el momento de su detención en julio, García se quejó de problemas de salud y posteriormente fue trasladado a un centro médico para su evaluación y tratamiento. El abogado de García emitió un comunicado en el que afirmaba que García ha hablado abiertamente de sus problemas de salud mental a lo largo de los años, y añadía que el boxeador está luchando actualmente con una enorme carga emocional tras su escándalo de dopaje en su combate con Devin Haney.