El primer combate de las leyendas tuvo lugar en mayo de 1993 y terminó con la victoria de Jones por una convincente decisión unánime. Los deportistas se tomaron la revancha en la primavera de 2010, y entonces Hopkins resultó ser el mejor.
"Fue lo suficientemente inteligente como para neutralizar mis mejores armas y evitar mis golpes más duros. Aunque conseguí golpearle, no falló más de un puñetazo cada vez. Y de eso se trata en una pelea con gente tan singular como él: si consigues asestar un golpe potente, suele ir seguido de otro..."
"Era un todoterreno: el mejor boxeador, el mejor en defensa y en ataque. Roy Jones Jr. al principio de su carrera era velocidad, reflejos, poco convencionalismo y cosas por el estilo. Nadie, nadie podría haber vencido a Roy Jones al nivel que tenía en ese momento", declaró Hopkins en una entrevista concedida a la revista The Ring.