"Quería empezar a ganar masa muscular y llegar más alto. Lo deseaba de verdad. Así que intenté conseguir grandes combates en la división de peso crucero lo antes posible. Llevo peleando en el peso semipesado desde que tenía 16 años. Es hora de seguir adelante.
En la pelea con Ramírez, voy a pesar 193 libras. Me gustaría pesar 200, pero no quiero ganar demasiado y reducir la velocidad. Haré el peso y subiré un poco después del pesaje, pero no pasará nada loco.
No tener que preocuparse por el peso en el campamento es un gran alivio. Esto es genial. Ahora puedo comer todos los carbohidratos que quiera. Por supuesto, no como azúcar ni comida rápida. Pero, en general, puedo comer lo que quiera y seguir sintiéndome bien", declaró Smith en una entrevista concedida a Boxing Scene.
Recordemos que el combate entre Smith y Ramírez tendrá lugar el 7 de octubre en Las Vegas, Estados Unidos.