El estadounidense firmó un contrato con Bob Arum para realizar varias peleas. Todo ello con el fin de unificar los cuatro cinturones de peso ligero que luego defendió. Por su parte, Lomachenko estuvo asociado a Top Rank desde el principio de su carrera profesional, y el último sábado de octubre volvió al ring tras un largo parón y derrotó con algunos problemas a Jamaine Ortiz.
"Lomachenko es un gran boxeador, pero ya vimos lo que pasó en su pelea con el más grande Teófimo López. Y mi hijo parece que pesa quince libras más que Lomachenko. Hagamos esta pelea, estamos abiertos a ella", dice Bill Haney, padre y entrenador del actual campeón indiscutible de 61,2 kilos.