Se suponía que la pelea se llevaría a cabo en un peso pactado de 185 libras, es decir, entre el peso semipesado y el primer peso pesado. Para el ruso, se suponía que esto sería un calentamiento antes de una transición completa al peso crucero.
Kovalev, quien ostentaba el título de peso semipesado, peleó por última vez en noviembre de 2019, perdiendo antes de lo previsto ante Saúl Álvarez. Se suponía que se reuniría con Bekhtemir Melikuzev en enero del año pasado, pero pasó una prueba de dopaje positiva.