En la primera mitad del combate, Ortiz trabajó con éxito como número dos, se movió mucho y contraatacó en serie. López no pudo cortar las esquinas del ring, pero intentó lanzar golpes al cuerpo. Después del ecuador, el campeón aumentó el ritmo del combate y empezó a presionar activamente, mientras que el aspirante no fue capaz de dar una respuesta digna: actuó con demasiada pasividad y fracasó en el final.
Al final del encuentro, los tres jueces puntuaron el combate a favor de López (117-111, 115-113, 115-113).