"Conor está completamente conmocionado por las devastadoras consecuencias de perder el caso civil. Va a apelar el veredicto para limpiar su nombre. Conor está realmente disgustado por todo el asunto y se siente traicionado.
El daño comercial en el Reino Unido e Irlanda fue enorme, ya que los minoristas se negaron a vender su cerveza negra y su whisky Proper No. Twelve. Sin embargo, el juicio no ha causado tanto daño comercial en Estados Unidos, donde la mayoría de sus fans le apoyan. Por el momento quiere abandonar Irlanda y establecerse en Estados Unidos".