Jake Paul, el influencer convertido en boxeador, causó controversia esta semana con un video de TikTok que dividió a los fans. Paul, que cuenta con 18.7 millones de seguidores en la plataforma, publicó un clip vistiendo la camiseta de Lionel Messi mientras realizaba la celebración característica de Cristiano Ronaldo.
El video, destinado a promover la bebida energética Celsius, mostró a Paul derribando tres latas en un poste de gol. Pero no fue la colocación del producto lo que captó la atención de los espectadores. La combinación desajustada de la camiseta de Messi y la celebración de Ronaldo provocó una avalancha de reacciones de los aficionados al fútbol.
Los seguidores de Cristiano fueron particularmente vocales en su crítica. Un fan comentó: "El nuevo Ronaldo con la camiseta de Messi," mientras que otro llegó a decir: "Ni siquiera Judas llegó tan lejos." Algunos espectadores cuestionaron la autenticidad del video, con comentarios como "¿Quién demonios está tirando las latas?" y "Conexión Bluetooth."
Esta no es la primera vez que la familia Paul ha causado revuelo en el mundo del fútbol. El hermano de Jake, Logan, recientemente se encontró en una disputa legal con el equipo de Messi sobre marcas de bebidas. Logan acusó al equipo de Messi de copiar el diseño del producto, lo que llevó a una demanda por competencia desleal.
La situación se intensificó cuando Logan retó a Messi a un combate de boxeo. El guardaespaldas de Messi, Yassine Cheuko, respondió diciendo que Leo ni siquiera sabía quién era Logan. Inquebrantable, Logan declaró que solo pelearía si Yassine aceptaba beber Prime después de perder.
Jake y Logan Paul se han hecho un nombre al buscar la controversia. Su habilidad para la provocación los mantiene en el centro de las conversaciones digitales, incluso cuando eso significa jugar con fuego en el mundo de las rivalidades deportivas.
Mientras los fans continúan debatiendo la idoneidad del último truco de Jake, Messi sigue centrado en su carrera, aparentemente indiferente al ruido que lo rodea. En cuanto a Jake Paul, ha demostrado una vez más su asombrosa habilidad para mantenerse en el centro de atención, para bien o para mal.