Thomas Hearns, la leyenda del boxeo "Hitman", ha elegido a Wilfred Benitez como el mejor luchador que jamás ha enfrentado. Esta revelación se produjo durante una entrevista de "Los Mejores que He Enfrentado" con The Ring Magazine, sorprendido a muchos que esperaban que nombrara a uno de sus rivales más famosos.
Hearns, un campeón mundial en cinco categorías de peso, forjó una carrera increíble que abarcó casi 30 años. Comenzó a boxear profesionalmente en 1977 y rápidamente ascendió a la prominencia en la década de 1980. El "Hitman" hizo historia como el primer boxeador en ganar títulos mundiales en cinco categorías de peso diferentes, culminando este logro con una victoria por decisión unánime sobre el campeón mundial de peso semipesado de la WBA en 1991.
Durante su mejor momento, Hearns formó parte de un grupo de élite conocido como los "Cuatro Reyes", que incluía a Roberto Durán, Marvelous Marvin Hagler y Sugar Ray Leonard. Derrotó a Durán, perdió ante Hagler y tuvo resultados mixtos contra Leonard, perdiendo su primer combate y terminando con un empate controvertido en la revancha.
Pero cuando se le preguntó sobre su oponente más difícil, Hearns miró más allá de estos nombres legendarios y destacó a Wilfred Benitez. Explicó su elección:
"Diría que Wilfred Benitez era muy bueno. Era astuto y muy hábil. Me gusta la habilidad de Benitez. Se movía bien y peleaba en todo el ring."
Benitez, apodado "El Radar", a menudo era referido como el "quinto rey" de esa era. Comenzó su carrera profesional a los apenas 15 años en 1973. Tres años después, hizo historia al convertirse en el campeón mundial más joven de todos los tiempos, destronando al campeón mundial de peso superligero de la WBA, Antonio Cervantes, a la edad de 17 años.
Las excepcionales habilidades defensivas de Benitez y su inteligencia en el ring lo convirtieron en un oponente formidable para cualquier persona. Perdió ante Sugar Ray Leonard en 1979, pero se recuperó para vencer a Roberto Durán en enero de 1982. Más tarde ese mismo año, se enfrentó a Hearns, perdiendo por decisión mayoritaria en un combate muy reñido.
Las peleas de Hearns contra los otros "Reyes" son a menudo recordadas como algunas de las mejores en la historia del boxeo, pero su elogio a Benitez arroja luz sobre un campeón a veces pasado por alto de esa era.
Tristemente, la historia de Benitez sirve como un recordatorio contundente de los peligros del boxeo. Sufrió un daño cerebral severo por traumatismos repetidos en la cabeza, lo que llevó a una enfermedad neurológica debilitante más adelante en la vida. Su trágico declive subraya los riesgos que enfrentan los luchadores en la búsqueda de la gloria en el ring.
El reconocimiento de Hearns a Benitez como su mayor oponente no solo honra a un boxeador hábil, sino que también atrae la atención hacia un luchador cuya legado podría de otro modo ser opacado por sus contemporáneos más famosos.