La pelea de regreso de Ryan Garcia terminó en derrota el viernes pasado en Times Square, Nueva York. La exestrella en ascenso perdió ante Rolando 'Rolly' Romero, asestando otro golpe a su carrera en el boxeo.
Garcia volvió al ring después de una suspensión de un año. Dio positivo por ostarina antes de una pelea programada con Devin Haney el 20 de abril de 2024. Este revés siguió a una derrota por nocaut ante Gervonta Davis, haciendo que la pelea contra Romero fuera crucial para la reputación de Garcia.
La pelea no salió como estaba planeado para 'KingRy'. Cayó al lona en el segundo round y pasó el resto del combate en la defensiva. Garcia se vio fuera de ritmo y demasiado confiado, careciendo de la precisión necesaria para un regreso exitoso.
En lugar de centrarse en Romero, Garcia parecía más interesado en un desempate con Haney. En el evento de 'Grand Arrivals' en Nueva York, incluso amenazó al padre de Haney, Bill.
"Sí, estoy dispuesto a demostrarlo. ¡No puedo esperar! También voy a golpear a su padre. A él es a quien quiero golpear, pero Devin puede ganar de nuevo. Voy a hacer lo mismo que hice la última vez. Tal vez podamos volver a hacerlo en Nueva York. ¿Por qué no? Que regrese y haga lo que le hice la última vez."
La derrota de Garcia lo coloca en una posición difícil en el mundo del boxeo. Bob Arum, jefe de Top Rank, desestimó la idea de que Garcia se enfrentara a Teofimo Lopez, quien recientemente derrotó a Arnold Barboza Jr.
"Esas no son realmente peleas competitivas para Teofimo,"dijo Arum, dando una dura lección de realidad sobre la situación de Garcia en el deporte.
Esta derrota plantea preguntas sobre el enfoque y la preparación de Garcia. Su valor ha caído significativamente, y los grandes promotores ahora lo ven como no competitivo frente a los mejores boxeadores. Garcia debe reagruparse y reenfocarse si quiere recuperar su posición en el mundo del boxeo.