La afirmación de Rahman tiene peso, considerando que sorprendió al mundo hace 24 años al noquear a Lewis en Sudáfrica. Esa noche, Rahman se llevó los títulos de peso pesado de la WBC y la IBF en lo que se considera una de las mayores sorpresas en la historia del boxeo.
Lewis, a menudo considerado como uno de los más grandes pesos pesados de todos los tiempos y el mejor boxeador británico de la historia, no dejó que esa derrota lo definiera. Siete meses después, "El León" se tomó su revancha. En su revancha, Lewis detuvo a Rahman en el cuarto asalto con un brutal combo de izquierda-derecha.
La sorpresa inicial puso a Rahman en el mapa, pero el poder de Lewis dejó una impresión duradera. En su reciente entrevista, Rahman no dudó cuando se le preguntó sobre el golpeador más duro que había enfrentado.
"Tendría que decir Lennox Lewis, definitivamente."
La carrera de Lewis habla por sí misma. Ganó una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988 antes de convertirse en profesional. Como profesional, se convirtió en el campeón indiscutido de peso pesado en 1999 después de vencer a Evander Holyfield. Lewis ganó el campeonato de peso pesado tres veces en total.
La carrera de Rahman tuvo sus propios puntos destacados después de las peleas con Lewis. Recuperó el título de la WBC en 2005 y lo defendió a un empate por decisión mayoritaria contra James Toney en 2006. Su historial incluye peleas con otros pesos pesados notables como David Tua, Alexander Povetkin y Wladimir Klitschko.
Lewis se retiró con solo dos derrotas en su récord, ambas las vengó contra Rahman y Oliver McCall. Efectivamente venció a cada boxeador que enfrentó, consolidando su legado como uno de los grandes del boxeo de todos los tiempos.
El reconocimiento de Rahman del poder de Lewis añade otra capa al ya impresionante legado del boxeador británico-canadiense. Sirve como un recordatorio del impacto que tuvo Lewis en el ring, incluso sobre aquellos que lograron vencerlo.