Fury, conocido como "El Rey Gitano", anunció su retirada a principios de año, pocas semanas después de su segunda derrota ante Usyk. En mayo del año pasado había sufrido la primera derrota de su carrera ante el ucraniano, perdiendo la oportunidad de convertirse en campeón indiscutible. Ambos volvieron a verse las caras en diciembre, y Usyk se impuso en un reñido combate a 12 asaltos.
A pesar de los logros de Usyk, como sus victorias sobre Anthony Joshua y Daniel Dubois tras ascender desde el peso crucero, Fury ve más potencial en Anderson, el púgil de Ohio de 25 años.
En declaraciones al podcast Pound 4 Pound, Fury afirmó:
"También me gustaría ver a Jared Anderson de nuevo en la mezcla, el 'joven gran bebé'. Para mí es el peso pesado con más talento del mundo, con diferencia, pero en su último combate perdió por nocaut, así que el talento a veces no basta si te meten en peleas para las que no estás preparado".
Los elogios de Fury vienen acompañados de una nota de cautela. Anderson sufrió la primera derrota de su carrera el pasado agosto, al ser noqueado en el quinto asalto por Martin Bakole. Desde entonces se ha recuperado, superando a Marios Kollias en febrero de este año.
El joven estadounidense ha disputado muchos asaltos con Fury, lo que ha permitido al campeón retirado ver de cerca sus habilidades. Anderson ha sido considerado como el próximo gran peso pesado de Estados Unidos, y ahora se enfrenta al reto de estar a la altura de ese potencial.
Los comentarios de Fury demuestran que sigue creyendo en el talento de Anderson, incluso después del revés. La división de los pesos pesados estará muy atenta para ver si el "joven gran bebé" puede dar la razón a Fury y convertirse en una fuerza en la categoría de peso.