Benavidez, que ascendió desde el peso supermedio, llegó al combate como favorito. Cumplió las expectativas con su ritmo de trabajo extremo, su inteligente selección de golpes y sus potentes combinaciones. Benavidez suma 24 nocauts en 30 victorias, y su actuación contra Morrell demostró por qué es un rival tan temido.
Morrell no se lo puso fácil a Benavidez. Consiguió un derribo al principio del combate cuando Benavidez tropezó. Pero Benavidez se recuperó rápidamente y volvió al trabajo. Al final de los doce asaltos, el rostro de Morrell mostraba las marcas de una dura batalla.
Después de la pelea, Morrell dijo:
"No es que me estuviera pegando tan fuerte, no estaba sintiendo sus golpes mucho más de lo que él estaba sintiendo los míos... Sé que puedo [ganarle]. Quizá no esta noche, pero la próxima, al 100%".
A pesar de la confianza de Morrell, la victoria de Benavidez fue clara. El púgil invicto demostró que tiene un gran depósito de gasolina y que puede ser peligroso contra rivales zurdos. Con sólo 28 años, Benavidez respondió a todas las preguntas sobre su ascenso al peso semipesado.
Benavidez encabeza ahora las clasificaciones del CMB y la AMB. Su próxima pelea podría ser contra el ganador de la revancha indiscutible del peso semipesado entre Artur Beterbiev y Dmitry Bivol. Si Beterbiev gana, podríamos ver una pelea inmediata con Benavidez. Pero si Bivol le da la vuelta a la tortilla, existe la posibilidad de que veamos una trilogía en ciernes.
Pase lo que pase, Benavidez ha dejado claro que es una fuerza a tener en cuenta en la división de peso semipesado.