Ryan García ha decidido unirse al programa de pruebas de drogas VADA para su próxima revancha con Devin Haney. Este movimiento marca un cambio en la postura de García sobre las pruebas de drogas después de su polémica primera pelea.
En abril de 2024, García y Haney se enfrentaron en un combate muy esperado en el peso superligero. García ganó a los puntos y derribó a Haney varias veces. Pero la victoria no duró mucho. García no superó dos controles antidopaje después del combate, lo que convirtió el resultado en no disputado. La Comisión Atlética del Estado de Nueva York le suspendió durante un año, por lo que no pudo volver a pelear hasta abril de 2025.
García alegó que una sustancia contaminada provocó los fallos. También dijo que nunca volvería a utilizar la VADA. Cuestionó por qué VADA era siempre la organización de pruebas elegida y sugirió el uso de alternativas.
"Se está volviendo muy extraño por qué siempre es VADA, ¿podemos conseguir otras organizaciones para hacer las pruebas? Porque tienes a Bill [Haney] presionando sólo a la VADA, nunca dice nada de otras organizaciones y es extraño que esté presionando a una determinada organización. ¿No quieres cualquier tipo de pruebas?".
Pero ahora, Boxing Scene informa de que García se ha inscrito en el protocolo de control antidopaje de la VADA. Este giro de 180 grados sugiere que se toma en serio la revancha.
Según los informes, la revancha es un hecho para finales de este año. Pero antes de eso, ambos púgiles tienen otros combates en los que centrarse. García se enfrentará a Rolly Romero en mayo, mientras que Haney peleará contra José Ramírez ese mismo mes.
La primera pelea García-Haney estuvo llena de dramatismo incluso antes de los controles antidopaje fallidos. García no pesó lo suficiente para optar al título superligero del CMB. Algunas personas del mundo del boxeo también criticaron el comportamiento de García antes de la pelea, preocupados por su bienestar.
El control antidopaje fallido de García después del combate añadió otra capa de controversia a un acontecimiento ya de por sí polémico. Ahora, a sus 26 años, "King Ry" parece dispuesto a dejar todo eso atrás y demostrar su valía en una revancha limpia.
