Los bandos de Oleksandr Usyk y Tyson Fury están enzarzados en una acalorada disputa sobre las reglas del combate y los jueces para su próximo combate por el campeonato de los pesos pesados.
Las dos partes no se ponen de acuerdo sobre un juez sustituto, lo que deja la situación en punto muerto. Pero esa no es la única cuestión que causa fricción entre los bandos.
El equipo de Fury ha presionado para que se aclare lo que cuenta como golpe bajo. Quieren asegurarse de que no hay confusión como en la pelea de Usyk con Daniel Dubois. Frank Warren, representante del equipo de Fury, explicó su postura:
"Cualquier cosa por debajo del ombligo es un golpe bajo y muchos púgiles llevan los calzoncillos más altos y eso a veces lleva a lo que se podría decir confusión, como ocurrió con Usyk y Daniel Dubois".
El equipo del británico también pidió la prohibición de objetos extraños en las esquinas. Esta petición llega después de que Usyk besara una cruz antes de protagonizar una impresionante actuación en su primer combate. Warren aclaró sus preocupaciones:
"Después de la pelea hubo muchas especulaciones, no estaban seguros de lo que era. Nos limitamos a cortar por lo sano. Si se utiliza algo que no sea agua en los labios del púgil, el inspector se lo llevará y lo retendrá, y si se ve que algo no es correcto, se ocuparán de ello, lo probarán, lo que sea, lo que tengan que hacer".
El objetivo de estas aclaraciones es evitar controversias y garantizar un combate limpio. Como es probable que Fury apunte al cuerpo de Usyk, la definición de golpe bajo se convierte en crucial.
