Su primer combate, en mayo, se saldó con la victoria de Usyk por decisión dividida. Hirió gravemente a Fury en el noveno asalto, propinando al boxeador británico la primera derrota de su carrera. Fury no tardó en activar la cláusula de revancha, y Usyk renunció a su cinturón de la IBF para hacerla realidad.
El mes pasado, los púgiles se reunieron en una rueda de prensa de presentación. El ambiente era amistoso, y ambos intercambiaron saludos. Pero las cosas han cambiado desde que Fury llegó a Arabia Saudí. Se negó a hacer un entrenamiento abierto y sólo respondió a las preguntas con "dolor" o "herido".
La tensión alcanzó su punto álgido durante una reciente rueda de prensa. Fury y Usyk se miraron fijamente durante más de diez minutos. Fury insultó a Usyk, llamándole "rata fea b*****d" entre otras cosas. Usyk mantuvo la calma y le dijo a Fury: "No tengas miedo".
El cara a cara dio que hablar. Un usuario de Twitter llamado UsyksBurner publicó un vídeo con audio en primer plano del intercambio y comentó:
"Todo lo que tengo que decir es que está tratando de convencerse a sí mismo".
Muchos aficionados creen que Fury parecía nervioso. Algunos dijeron que estaba "haciendo demasiado", mientras que Usyk se mantuvo "fresco como una lechuga".
Ambos púgiles tuvieron sus momentos en el primer combate. Ahora, todo el mundo se pregunta qué cambios han hecho para la revancha. La resistencia y la habilidad jugarán un papel importante a la hora de decidir quién sale vencedor.
Faltan pocos días para el combate y el mundo del boxeo está impaciente por ver cómo se desarrolla. ¿Se vengará Fury o demostrará Usyk que su primera victoria no fue una casualidad? Lo sabremos el sábado por la noche en Riad.