Casi un mes después del suceso, el hijo de Mike Tyson, Amir Tyson, compartió algunas ideas sobre el estado de ánimo de su padre:
"Ha estado en su zona permaneciendo para sí mismo. Está muy bien. No lo está llevando mal. Noqueó a Netflix y todo fue gracias a él. Fue una noche histórica. Todo el mundo cobró y fue una buena noche".
El combate marcó un hito importante al ser el primer evento de boxeo en directo retransmitido por Netflix. Resultó ser un enorme éxito comercial, generando más de 18 millones de dólares en taquilla y atrayendo más de 60 millones de streams simultáneos.
A sus 58 años y tras casi dos décadas alejado del boxeo profesional, a Tyson le resultaba difícil competir contra el joven Paul. El combate parece haber puesto fin a la carrera boxística de Tyson de una vez por todas.
Jake Paul, el YouTuber convertido en boxeador, sigue adelante con su carrera boxística y planea un gran 2025. Sin embargo, ha hecho un cambio significativo en sus objetivos. Un enfrentamiento con Canelo Álvarez, que antes ocupaba un lugar destacado en la lista de deseos de Paul, ya no parece ser una prioridad.
El éxito de la pelea ha cimentado su lugar en la historia del boxeo, demostrando que enfrentamientos poco convencionales pueden atraer audiencias masivas y éxito comercial.