Gervonta Davis y Ryan García han acordado una revancha, preparando el escenario para otro enfrentamiento de boxeo de alto nivel. Los púgiles han decidido enfrentarse en las 140 libras, sin peso de captura en esta ocasión.
Su primer enfrentamiento, en abril de 2023, acabó con Davis derrotando a García en el séptimo asalto. La pelea fue un éxito comercial, con más de 1,2 millones de compras de pago por visión y una recaudación de 22,8 millones de dólares. Davis ganó ese combate con un brutal golpe al cuerpo, que tuvo lugar en un peso de 136 libras.
Desde entonces, ambos púgiles han seguido caminos diferentes. Davis defendió su título de peso ligero de la AMB contra Frank Martin. García, por su parte, venció a Óscar Duarte y después a Devin Haney, pero la victoria de Haney fue anulada por no superar las pruebas de dopaje. Estos resultados provocaron la prohibición de García de boxear hasta abril de 2025.
A pesar de la situación actual de García, las conversaciones sobre una revancha se han calentado. Davis expuso sus condiciones para la pelea en una entrevista reciente:
"Sí [es una pelea masiva]. Pero no a 143, ¿por qué 143? Probablemente en 140, es el siguiente peso desde 135, es el peso en el que pelea. Hagamos 140 y él puede rehidratarse hasta 150, o como mucho 152, yo soy el hermano de 135".
García había sugerido inicialmente un peso de 143 libras, alegando que el límite de 136 libras en su primera pelea obstaculizaba seriamente su rendimiento. Sin embargo, los púgiles han llegado ahora a un acuerdo verbal en las redes sociales para enfrentarse en 140 libras, que es la división de peso superligero.
El acuerdo incluye una cláusula de rehidratación, que limita a García a 150-152 libras la noche del combate. Esta condición aborda la disparidad de peso entre los dos púgiles, ya que Davis suele competir en el peso ligero (135 libras) y García en el superligero.
Aunque esta revancha está generando expectación, cabe señalar que Davis tiene planes más inmediatos. Se espera que se enfrente a Lamont Roach Jr. en su próximo combate, que supondrá el primer ascenso de Roach a la división de peso ligero. El anuncio de este combate está previsto para marzo del año que viene, después de que se retrasaran las fechas anteriores de diciembre y enero.
La revancha Davis-García promete ser otro gran acontecimiento del boxeo, basado en el éxito comercial de su primer encuentro. Los aficionados estarán ansiosos por ver si el cambio de categoría de peso conduce a un resultado diferente en esta esperada secuela.