Oleksandr Usyk venció a Tyson Fury en mayo, convirtiéndose en el campeón indiscutible de los pesos pesados. El combate terminó por decisión dividida, lo que supuso la primera derrota de Fury en el boxeo profesional.
Las tarjetas de puntuación de los jueces mostraron una contienda reñida. Dos jueces favorecieron a Usyk con puntuaciones de 115-112 y 114-113, mientras que un juez lo vio 114-113 para Fury. Los estrechos márgenes de las tarjetas oficiales reflejaron la intensidad del combate.
Tras el combate, Fury no estuvo de acuerdo con la decisión. Dijo en una entrevista posterior al combate:
"He vuelto a ver el combate muchas veces y sigo teniendo la misma respuesta, pensé que había ganado el combate, pensé que había hecho lo suficiente".
Fury cree que ganó todos los asaltos menos tres. Le dio a Usyk el octavo asalto por un buen puñetazo que le rompió la nariz, el noveno por 10-8 y el décimo.
Usyk vio la pelea de otra manera. En una entrevista con Boxing King Media, el ucraniano reveló su propia puntuación, dándose a sí mismo siete asaltos y a Fury cinco.
Los dos púgiles volverán a verse las caras el 21 de diciembre en Arabia Saudí. Fury cree que esta rivalidad podría llegar a ser histórica. Dijo:
"Creo que será una de las grandes trilogías, Usyk y yo, como Jack Dempsey y Gene Tunney. Nos remontamos a aquellos tiempos. Fueron grandes combates y creo que cuando vuelva a ganarle, sin duda haré una trilogía con él. 100%. Tiene que ser. Uno cada uno y luego la trilogía".
La predicción de Fury de una trilogía depende de que gane la revancha. Pero con Usyk demostrando que puede vencer al hasta ahora invicto Fury, el próximo combate promete ser tan emocionante como el primero.