Usyk ganó por decisión dividida, lo que le convierte en el primer campeón indiscutible de los pesos pesados desde Lennox Lewis hace casi 25 años. El combate estuvo reñido, con Fury controlando los asaltos intermedios. Pero Usyk dio la vuelta a la situación en el noveno asalto y estuvo a punto de eliminar a Fury. Ese asalto (10-8) acabó siendo crucial para la victoria de Usyk.
Al recordar el combate, Usyk habló de lo fuerte que le golpeó Fury. En un vídeo de YouTube, dijo:
"El uppercut, dolió, dolió mucho. Todos ustedes ven dibujos animados, recuerdan que algún personaje de dibujos animados tiene algo en la cabeza, los pájaros vuelan, bueno, eso es realmente los pájaros vuelan sí algunas cigüeñas volaban cerca de mí".
La descripción de Usyk de "ver pájaros" después de recibir los uppercuts de Fury demuestra lo potentes que fueron esos golpes.
Pero Fury ve las cosas de otra manera. Afirma que el combate fue más fácil de lo que esperaba. Fury dijo:
"En realidad fue mucho más fácil de lo que pensaba; mucho más fácil. La gente decía que era un hombre difícil de golpear; yo le asestaba combinaciones de tres y cuatro golpes, y me reía de él. Mi problema en ese combate fue que me estaba divirtiendo demasiado; probablemente fue demasiado fácil, a veces demasiado fácil. Era como si estuviera allí con un boxeador aficionado local; estaba disfrutando demasiado y jugando con él".
Fury cree que perdió porque no estaba lo bastante concentrado y que el combate le resultó "demasiado fácil".
La revancha está fijada para el 21 de diciembre en Arabia Saudí. Usyk, que ascendió desde el peso crucero, sigue siendo el único hombre que ha derrotado al "Rey Gitano" como profesional. Ambos luchadores querrán demostrar su valía en este segundo combate, con el título indiscutible de los pesos pesados de nuevo en juego.