El excampeón del mundo fulmina a Deontay Wilder: "Su único truco ya no funciona"

La carrera de Deontay Wilder está contra las cuerdas. Las últimas actuaciones del excampeón de los pesos pesados del CMB han hecho que aficionados y expertos se cuestionen su futuro en este deporte.

Wilder comenzó su carrera con una impresionante racha de 40 combates sin conocer la derrota, en los que noqueó a 39 rivales. No tuvo problemas con aspirantes como Dominic Breazeale y Luis Ortiz. Pero todo cambió cuando se enfrentó a Tyson Fury.

Su primer combate terminó en empate, con Fury sobreviviendo a dos derribos. En la revancha, Fury detuvo a Wilder en el séptimo asalto. La trilogía acabó con Wilder noqueado y marcó el inicio de su declive.

Desde entonces, la carrera de Wilder ha sido una montaña rusa. Se recuperó con una victoria sobre Robert Helenius, pero sufrió una sorprendente derrota por decisión unánime ante Joseph Parker. Su combate más reciente se saldó con una derrota por nocaut en el quinto asalto ante Zhilei Zhang.

James Toney, campeón mundial de los tres pesos, no se contuvo al hablar de la carrera de Wilder. En una entrevista con Fight Hub TV, Toney dijo:

"Deontay Wilder y esa bomba bulls**t. Todo el mundo creía en eso. Le dije a todo el mundo que miraran contra quién estaba peleando. Pelea contra vagos. Si yo estuviera peleando con ellos tendría todas las peleas por nocaut. A los tipos con los que peleó también los habría noqueado en dos o tres asaltos. Lo prepararon bien y cuando llegó el momento, falló. No estaba preparado. Es triste ver lo que le pasó, pero es lo que es. Deontay era un pony de un solo truco".

Las críticas de Toney apuntan a un problema mayor en la carrera de Wilder. Aunque es conocido por su potente mano derecha, Wilder carece de versatilidad en su estilo de lucha. Esta limitación se ha hecho más evidente a medida que se ha enfrentado a rivales más duros.

En los últimos combates, Wilder se ha mostrado dubitativo, y su otrora temida potencia de pegada parece menos amenazadora. Algunos expertos han sugerido incluso que debería plantearse la retirada.

Cabe señalar que el propio Toney tuvo una larga carrera, con 92 combates y 10 derrotas. Nunca le pararon en un combate, aunque algunos críticos consideraban que peleaba demasiado tiempo. Toney sostiene que los púgiles modernos no durarían en su época.

Mientras la carrera de Wilder pende de un hilo, el mundo del boxeo está pendiente de si el "Bombardero de Bronce" puede recuperar su antigua gloria o si su tiempo en la cima ha llegado realmente a su fin.