De La Hoya sabe un par de cosas sobre ser el mejor. Ganó el premio al púgil del año de la revista The Ring en 1997 y 1998 y empezó su carrera con 31 victorias antes de perder contra Félix Trinidad en 1999. Terminó con 39 victorias en 45 combates. El estilo llamativo de De La Hoya y su ofensiva total le llevaron a la cima del deporte.
En estos momentos, el debate libra por libra gira en torno a Crawford, Oleksandr Usyk y Naoya Inoue. Estos tres son los únicos púgiles que se han convertido en campeones indiscutibles en dos divisiones durante la era de los cuatro cinturones.
De La Hoya compartió sus pensamientos con FightHype:
"Crawford me encanta, porque es probablemente el mejor boxeador libra por libra del mundo. Su estilo gusta a los aficionados. Es un boxeador tremendo, invicto. Subió una categoría de peso y se encontró con un tipo realmente duro. A veces no vas a estar tan bien como en tus peleas anteriores luchando contra tipos más pequeños. No pasa nada. Es un proceso de aprendizaje. Tiene que establecerse en 154. Probablemente luchó contra el tipo más duro. No el tipo más peligroso, sino el más duro".
Crawford se convirtió en indiscutible en el peso welter el año pasado, limpiando una división por segunda vez en su carrera. Después subió a 154 y venció a Israil Madrimov por puntos. El combate puso fin a la larga racha de derrotas de Crawford, pero le permitió llevarse un cinturón a Omaha.
De La Hoya promociona a Vergil Ortiz y podría querer pelear con Crawford. Pero es probable que Crawford tenga como objetivo a Saúl 'Canelo' Álvarez antes de que se retire.