Oleksandr Usyk, campeón mundial de los pesos pesados de la OMB, la FIB y la AMB, declaró que, tras el inicio de una guerra a gran escala con Rusia, quiso dejar vacantes sus cinturones de campeón porque no podía pensar en boxear.
"En aquel momento, no pensaba en boxear... Ni siquiera pensaba en el boxeo. Pensaba incluso en dejar libres los cinturones, para que los chicos siguieran luchando por ellos, y entonces, en cuanto todo hubiera terminado, volveríamos y diríamos: "Bueno, esta es la situación, vamos a tener algunas opciones u otra cosa".
Alexander también dijo que los militares le dijeron que no dejara el boxeo, que se preparara para la revancha con Joshua, y esto se convirtió en su motivación.