El peso pesado estadounidense Jarrell Miller (23-0-1, 20 KOs), que fue sorprendido en tres ocasiones por dopaje hace más de tres años, vuelve a tener la oportunidad de realizar grandes combates. La Comisión Atlética del Estado de Nevada acaba de anular su prohibición y le ha concedido una licencia que le permite boxear en todo el país.
En abril de 2019 se anunció oficialmente el hallazgo de endurobol en el cuerpo de Miller, y luego se informó de que el estadounidense también dio positivo por hormona de crecimiento y EPO. No fue autorizado a la pelea de campeonato de junio con Anthony Joshua en Nueva York. Posteriormente, Miller fue sustituido por Andy Ruiz y el mexicano obtuvo una sensacional victoria, y perdió los cinturones en la revancha de diciembre. A pesar de estos controles de dopaje positivos, la OMB suspendió a Miler sólo por seis meses. El estadounidense debía volver al ring en julio de 2020, pero se volvió a encontrar una enduroball en su poder.
Finalmente, Miller fue suspendido por dos años, y parecía que los aficionados al boxeo no volverían a verlo en el ring. Sin embargo, Miller regresó en 2022, derrotando a Ariel Bracamonte en junio y a Derek Cárdenas un mes después. Tras lo anterior, Miller consiguió su licencia, y su carrera en Estados Unidos puede retomar. Mientras tanto, Miller celebrará su próxima pelea el 4 de noviembre en Tanzania, donde luchará contra Awad Tamim (15-5, 10 KOs).