“Hay siete mil millones de personas en el mundo y yo soy el maldito campeón de peso pesado y soy el número uno. De toda esta gente, soy el bastardo más grande, más gordo y más feo del planeta. Durante más de trece años de mi carrera profesional, he viajado por el mundo, conocido y derrotado a todos. Todos murieron con este gordo del norte de Inglaterra”, dijo a su estilo el “Rey de los gitanos”, quien derrocó a Vladimir Klitschka en su arena en Alemania, y a Wilder con él en América.
“La trilogía de Wilder me dio que pensar. Después de la última pelea, aparecieron bultos del tamaño de un puño en la parte posterior de mi cabeza. Estaba confundido, no recordaba mucho. Al final, pensé que tal vez era hora de irme”, admitió Fury.
Recordemos que el gigante de Manchester dominó y noqueó a Dillian Whyte en el sexto asalto a fines de abril. Previo a eso, anunció que esta sería la última actuación oficial de su carrera y, en el mejor de los casos, regresaría solo para peleas de exhibición.